Los toldos eléctricos son toldos extensibles convencionales que incorporan un motor para poderlos abrir y cerrar de forma fácil y cómoda. Normalmente, con un mando a distancia o incorporados a una instalación de domótica, ahorrándonos la tediosa tarea de hacerlo de forma manual girando una manivela.

Con estos toldos disfrutarás de una fresca y confortable sombra sin tener que realizar ni el más mínimo esfuerzo. ¡Ya no hay excusa para no abrir el toldo! Y si ves que el tiempo se pone feo, puedes estar seguro de que tus toldos no sufrirán las consecuencias. Podrás cerrarlos sólo con un clic o, si van equipados con sensores climatológicos, ellos mismos se recogerán.

La tecnología está presente en nuestra vida cotidiana y ha hecho que nuestros hogares vivan una revolución. Actualmente, gracias a la domótica, somos capaces de controlar a distancia los electrodomésticos de nuestro hogar, la calefacción, la alarma,etc. Simplemente con la ayuda de un móvil podemos acondicionar nuestra casa a las necesidades del momento. Gracias a esta popularización de la domótica, los toldos eléctricos o con motor se han convertido en uno de los sistemas de protección solar más solicitados.

 

Características y ventajas de los toldos eléctricos

Para motorizar un toldo, tan solo se necesita una fuente de energía para suministrar la corriente eléctrica necesaria. Según el tamaño y el tipo de toldo, variará la potencia del motor.

Prácticamente cualquier tipo de toldo puede ser un toldo eléctrico. Los toldos cofre, por ejemplo, suelen llevar un motor que permite abrirlos y cerrarlos de forma mucho más precisa que si lo hiciésemos de forma manual, evitando la entrada de polvo, suciedad e insectos. Este perfecto sistema de cerrado hace que tanto los mecanismos como la lona, tengan una mayor durabilidad.

Una característica estética interesante de los toldos eléctricos es que el motor queda oculto dentro del tubo o del cofre del toldo, siendo totalmente invisible y respetando al máximo la estética de la fachada.

Poder cambiar la estructura de un toldo (abierto o cerrado) con un solo clic, facilita muchísimo su uso. Así que, este tipo de toldos son especialmente recomendables para lugares en los que se abren y cierran con mucha frecuencia y para locales muy grandes en los que tenemos varios toldos. Además, como su uso no requiere realizar ningún esfuerzo, los toldos eléctricos son estupendos para ser utilizados por personas mayores o con movilidad reducida.

Olvídate de salir corriendo a cerrar los toldos para que no se mojen con la lluvia o se rompan con el viento. El hecho de que podamos cerrarlos rápidamente o que se cierren ellos mismos al detectar lluvia o viento (si tienen sensores climatológicos), hace que se prolongue la vida de los mecanismos y de la lona.

Otra de las grandes ventajas de los toldos motorizados y controlados por domótica, es que permiten regular durante todo el día la entrada de luz y calor en el interior de nuestro hogar, mejorando la eficiencia energética de nuestra vivienda o local. Si disponemos de aire acondicionado en el interior, posiblemente podremos disminuir su uso y de esta forma ahorrar en la factura de la luz.

toldos con motor domótica

Toldos motorizados con sensores climatológicos

Una de las principales prestaciones de los toldos eléctricos es que pueden utilizarse de forma remota mediante un móvil. Si además, añadimos unos sensores climatológicos, conseguiremos que estos toldos sean prácticamente autónomos y podremos despreocuparnos de su cuidado.

Uno de los sensores más útiles es el sensor de viento, consistente en un anemómetro (aparato meteorológico para medir la velocidad del viento). Gracias a la información recogida por el anemómetro, el toldo es capaz de recogerse de forma autónoma cuando las rachas de viento ponen en peligro su integridad.

El sensor solar es el más eficiente para regular la temperatura. Olvídate de llegar a casa y encontrar el salón recalentado por el sol del mediodía. Gracias a este sensor, el espacio estará a la mejor temperatura posible. El sensor solar mide la luminosidad del sol y, según el programa que hayamos establecido, desplegará o cerrará el toldo. El sensor solar nos permite tener la mejor temperatura posible dentro de nuestro hogar, mejora la eficiencia energética de nuestra vivienda y nos permite ahorrar en aire acondicionado y calefacción.

El sensor de lluvia consiste en un pluviómetro que mide la cantidad de lluvia que cae. Según la configuración establecida, cerrará el toldo para que el agua no se estanque en la lona y deteriore el tejido o los mecanismos. ¡Se acabó eso de salir corriendo al jardín y quedar empapado mientras cerramos el toldo!

Los toldos motorizados y con sensores aportan un extra de tranquilidad en nuestras vidas, pudiéndonos despreocupar de la climatología y pudiendo disfrutar al máximo de nuestro hogar y de nuestros espacios exteriores, sean terrazas, porches, patios o jardines.

 

Sombrha: Especialistas en toldos con motor

En Sombrha somos especialistas en la instalación de toldos eléctricos o con motor. Si tienes dudas sobre qué sistema de protección solar poner en tu vivienda o local comercial, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Nuestros técnicos estarán encantados de asesorarte y contestar a todas tus preguntas. Y si al final decides incorporar a tu hogar uno de estos toldos con motor, te podemos hacer un presupuesto sin compromiso. ¿Qué te parece?